lunes, 20 de enero de 2014

Un año de Otakus y Mazmorras



Cómo pasa el tiempo. Hace un año estaba sentado con +Helena Bermejo  planeando lo que sería la primera tira de Otakus y Mazmorras, decidiendo cómo serían los personajes y cómo reflejar nuestras propias aventuras en las tiras mientras dejábamos volar nuestra imaginación. El próximo viernes, con la tira número 53, Otakus y Mazmorras cumple un año en la red. 53 semanas en las que no hemos faltado a ninguna cita. En un año, nos ha pasado un poco de todo y eso también se ha reflejado en nuestras tiras, con pequeños homenajes y reflejos de aquello que nos ocurría en la vida real. Hemos tenido todo tipo de comentarios, desde aquellos que directamente recomendaban no ver la serie sólo porque el título no les gustaba, a los que decían que cada vez que la leían querían dar un puñetazo al monitor. Pero también hemos tenido muy buenas críticas, de gente que se ha visto reflejada en las situaciones que planteábamos y se ha sentido identificada de alguna manera con nuestros personajes, porque de eso va un poco la serie.


Una de las críticas que nos hizo un lector, que afirmaba no gustarle la serie (pero que la seguía semanalmente) era que no entendía el humor de la misma. Me propuse, cuando la serie cumpliera un año, explicar un poco nuestra idea sobre cómo realizamos las tiras. Otakus y Mazmorras siempre utiliza un humor sencillo sin complicaciones o florituras y no pretende más que arrancar al lector una pequeña sonrisa de complicidad, porque los personajes se encuentran en una situación que podría haberle ocurrido a él. Otras veces hacemos uso de la desatada imaginación de los personajes para identificarlos con series de moda representando de forma épica a la par que cómica todo tipo de escenas cotidianas. Y no olvidemos cuando nuestros personajes caen en un renuncio, exagerando y criticando una actitud o situación para luego darse cuenta de que ellos mismos son partícipes, algo que de nuevo nos hace a sonreir de complicidad cuando el personaje es puesto en evidencia.

A pesar de su humor sencillo, y blanco, la serie no deja de esconder una crítica de muchas situaciones que son comunes en nuestra afición, como los concursos amañados, la hipersexualización de los personajes, el consumismo compulsivo o las relaciones en internet entre los fans. En cierto modo es también una autocrítica, ya que nosotros somos parte activa de esa comunidad de fans.

http://ramenparados.blogspot.com.es
En términos generales la serie ha funcionado bastante bien, también en su versión en inglés, donde curiosamente los lectores de todo el mundo se han visto reflejados en las aventuras de Sara y César. No quiero acabar esta pequeña entrada sin dar las gracias a Ramen Para Dos por ser el "altavoz" de la serie y a todos nuestros lectores habituales por los ánimos y cantidad de comentarios positivos.

Por muchos años más.


Puedes leer las tiras de Otakus y Mazmorras todos los viernes en Ramen Para Dos
Mirror (con una semana de diferencia) en Subcultura.